Estrategias de seguridad para el vehículo
Si bien los avances tecnológicos han hecho que los coches actuales sean mucho más seguros que hace unas décadas, la seguridad real sigue dependiendo de decisiones cotidianas que cada conductor debe tomar. Desde la revisión de componentes hasta el comportamiento al volante, todo cuenta.
En este artículo exploraremos diversas estrategias de seguridad que puedes implementar para proteger tu vehículo, a ti mismo y a los demás. Y recuerda que una de las mejores formas de comprobar que todo está en orden es solicitando una inspección técnica en la ITV que está en Ontinyent, donde verificarán que tu coche cumple con todos los requisitos legales.
La seguridad comienza por el mantenimiento preventivo
La primera línea de defensa frente a posibles accidentes o fallos mecánicos es un buen mantenimiento. No se trata solo de pasar revisiones periódicas, sino de adoptar una actitud proactiva y preventiva.
Revisión de frenos
Los frenos son uno de los sistemas más críticos del vehículo. Si notas ruidos al frenar, un recorrido más largo del pedal o que el coche se desvía ligeramente, acude a un taller de inmediato. Revisa el líquido de frenos al menos una vez al año y cámbialo cada 2 años.
Neumáticos en buen estado
Los neumáticos son el único punto de contacto entre el vehículo y la carretera. Deben tener la presión adecuada, un desgaste uniforme y una profundidad de dibujo mínima legal de 1,6 mm. La falta de adherencia por neumáticos en mal estado es una de las principales causas de accidentes.
Suspensión y dirección
Un sistema de suspensión en mal estado puede afectar gravemente la estabilidad del vehículo. Si sientes que el coche rebota más de lo habitual o escuchas ruidos extraños al girar, revisa amortiguadores y dirección cuanto antes.
Sistemas de iluminación y visibilidad
Ver y ser visto es esencial para evitar accidentes, especialmente de noche o con condiciones climáticas adversas. Mantener en buen estado todos los elementos de iluminación es una estrategia básica pero fundamental.
Revisa el funcionamiento de todas las luces (cortas, largas, intermitentes, antinieblas).
Cambia los faros fundidos de inmediato y lleva repuestos en el maletero si es obligatorio en tu país.
Limpia los faros con regularidad, ya que el polvo reduce la visibilidad.
Asegúrate de que los limpiaparabrisas funcionen correctamente y que el depósito de líquido esté lleno.
Además, recuerda que los cristales deben estar siempre limpios y sin grietas que puedan interferir con la visión del conductor.
Sistemas de seguridad activa y pasiva
Los vehículos modernos cuentan con numerosos sistemas de seguridad que ayudan a prevenir accidentes (activa) o a reducir las consecuencias en caso de impacto (pasiva).
Seguridad activa
ABS (Sistema antibloqueo de frenos): Evita que las ruedas se bloqueen durante una frenada brusca.
ESP (Control de estabilidad): Ayuda a mantener la trayectoria del coche en maniobras de emergencia.
Asistencia de frenado: Aumenta la fuerza de frenado cuando detecta una situación crítica.
Luces automáticas y sensores de lluvia: Mejoran la reacción del conductor ante cambios en el entorno.
Seguridad pasiva
Airbags: Revisa que el testigo del airbag no esté encendido. Un fallo en este sistema puede tener consecuencias graves.
Cinturones de seguridad: Comprueba que el anclaje funcione correctamente y que no haya holguras.
Reposacabezas bien ajustados: Ayudan a prevenir lesiones cervicales en caso de colisión.
Hábitos de conducción seguros
La tecnología y el buen mantenimiento ayudan, pero ninguna medida sustituye una conducción responsable. Estos hábitos pueden marcar la diferencia entre un viaje seguro y un accidente:
Respeta siempre los límites de velocidad.
Mantén una distancia de seguridad adecuada.
No uses el teléfono móvil mientras conduces.
Descansa cada dos horas en trayectos largos.
No conduzcas bajo los efectos del alcohol, drogas o medicamentos que alteren la atención.
Aplicar estos principios no solo te protege a ti, sino también a peatones, ciclistas y demás usuarios de la vía.
Seguridad contra robos y vandalismo
La seguridad del vehículo también implica evitar robos o actos vandálicos. Algunas estrategias simples pueden ayudarte a disuadir a los delincuentes:
Estaciona en lugares bien iluminados y transitados.
No dejes objetos a la vista dentro del coche.
Usa sistemas antirrobo: alarmas, bloqueos de volante, tuercas antirrobo en ruedas.
Si tu coche tiene sistema de cierre automático, asegúrate de que se activa correctamente al alejarte.
Para vehículos de alta gama o comerciales, considera la instalación de un sistema de geolocalización.
Seguridad en condiciones adversas
No todas las carreteras son iguales, y el tiempo tampoco. Lluvia, niebla, nieve o calor extremo requieren ajustes en la conducción y preparación del vehículo.
Lleva cadenas en invierno si conduces por zonas con nevadas.
En caso de niebla, usa luces antiniebla y reduce la velocidad.
Si viajas en verano, revisa el sistema de refrigeración del motor.
Ajusta la presión de los neumáticos según la temperatura ambiental.
Un coche preparado para condiciones extremas aumenta la seguridad de todos.
Formación y actualización del conductor
Estar al día con las nuevas normativas y mejorar las habilidades al volante también forma parte de la seguridad. Algunas ideas:
Participa en cursos de conducción segura o conducción en situaciones extremas.
Consulta con frecuencia las actualizaciones del Reglamento General de Circulación.
Conoce los sistemas de tu coche. Muchos vehículos nuevos cuentan con tecnología que requiere una breve formación para ser utilizada correctamente.
Inspección técnica del vehículo (ITV)
Una de las estrategias más directas y obligatorias para garantizar la seguridad del vehículo es pasar la ITV. No se trata solo de cumplir con la ley, sino de comprobar que todos los elementos esenciales para la seguridad están en perfecto estado.
En la ITV que está en Ontinyent puedes solicitar tu cita previa cómodamente por internet. Durante la inspección se revisarán, entre otros aspectos:
Sistema de frenos y dirección.
Estado de los neumáticos.
Alumbrado e indicadores de dirección.
Emisiones contaminantes.
Sistemas de seguridad pasiva.
Una ITV favorable es un indicador claro de que tu vehículo está en condiciones adecuadas para circular sin poner en peligro a sus ocupantes ni al resto de usuarios de la vía.
Conclusión
La seguridad del vehículo no depende únicamente del fabricante o de un sistema de asistencia. Es una suma de factores que el conductor debe gestionar día a día con responsabilidad, conciencia y prevención.
Desde mantener el coche en buen estado hasta conducir con prudencia, pasando por pequeños gestos como revisar los neumáticos o apagar el móvil antes de arrancar, todo cuenta. Y uno de los pilares esenciales en esta estrategia de seguridad es cumplir con la inspección técnica periódica.
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AUTOR: ITV Ontinyent
EN: Bienestar
