La buena suerte es el efecto del trabajo ordenado

No hay duda de que algunas personas nacen con algunas condiciones favorables, por ejemplo, nacer en la riqueza, tener el don de la música, disponer de una facilidad para las ciencias, etc. Pero cada uno de nosotros tenemos capacidades increíbles, solo debemos aprender a encontrarlas y lanzarnos a cumplir nuestras metas.

La suerte hay que aprender a construirla, ¿qué debemos hacer?, en primer lugar, debemos definir con exactitud que deseamos: una gran empresa exportadora de muebles de madera, ser millonarios, conquistar la pareja ideal, conocer los misterios espirituales, etc. Cuando tenemos muy claro los deseos entonces traducimos esas ideas en metas y objetivos, esto significa que hay que definir un plan concreto para cumplir la meta.

Para alcanzar una meta es necesario esforzarnos al máximo, hay que poner un orden estricto a cada una de nuestras actividades, esto podemos hacerlo a través del establecimiento de una meta poderosa, en el libro que habla sobre LAS ESTRATEGIAS PARA HACER DE SUS IDEAS METAS PODEROSAS, de Andrew Corentt usted podrá aplicar los pasos concretos para establecer metas poderosas, lo cual implica acceder a lo profundo de su mente a fin de dar instrucciones a su mente subconsciente respecto a las ideas que desea manifestar, de esa forma notara que el mundo se organizara para cumplir sus expectativas, cada uno de nosotros tenemos el poder en nuestro interior que crea el mundo físico, cuando en base al esfuerzo vamos acumulando energía mental entonces podemos hacer un intercambio maravilloso, al leer este libro su visión de un mundo limitado desaparecerá para siempre, tomara consciencia del autopoder y lo utilizara para cumplir todas sus metas.

Cuando damos lo máximo en una idea y cambiamos de creencias entonces notamos que “la buena suerte” llega, pero lo que ha ocurrido es que hemos modificado nuestro plano mental, una vez que una persona tiene un cambio en la forma de pensar, sentir y actuar, todo lo que le rodea tiene que ser diferente, es obligatorio.

Imaginemos que una persona se esfuerza en volverse un programador experto, después cuando funda una empresa y se hace rico, como puede decir alguien que “tuvo suerte” lo que paso es que el mismo construyo su suerte y ahora goza de una posición privilegiada gracias al esfuerzo, lo mismo debemos hacer nosotros si queremos alcanzar grandes triunfos.