Adicción al sexo. Cuando se pierde el control!

Esto no forma un inconveniente si la persona siente placer y confort con esta conducta. La persona adepta al sexo siente una elevada ansiedad asociada a sus conductas sexuales y no solamente placer.

Cada vez precisa estímulos nuevos más potentes para satisfacer su deseo sexual. Y es capaz de poner bajo riesgo su ambiente social y laboral para lograr una relación íntima. Lejos de lo que puede parecer, las relaciones íntimas con la pareja acostumbran a estar estropeadas pues la persona adepta al sexo desvía su deseo sexual fuera de la pareja.

A veces a través del empleo usual de la pornografía o bien a través de relaciones íntimas con prostitución y nuevos estímulos eróticos. Cada conducta sexual extramatrimonial va seguida de sentimientos de arrepentimiento y propósitos de no reiterar exactamente las mismas conductas en el futuro.

El componente más esencial para hallar soluciones, como ocurre con otras adicciones, es el reconocimiento de la problemática. Si se siente identificado con esta descripción, pida consulta con un terapeuta o bien llame a nuestro centro para más información.

En nuestro centro hallará profesionales que pueden comprenderle pues han tratado a muchos pacientes en su situación. La adicción al sexo o bien comportamiento sexual apremiante tiene un tratamiento que ha resultado eficiente habitualmente.