La historia de los relojes comenzó en la Europa del siglo XVI
La historia de los relojes comenzó en la Europa del siglo XVI, donde los relojes evolucionaron a partir de relojes portátiles accionados por muelles, que aparecieron por primera vez en el siglo XV. El reloj, que se desarrolló desde el siglo XVI hasta mediados del siglo XX, era un dispositivo mecánico que se accionaba dando cuerda a un muelle real que hacía girar los engranajes y luego movía las agujas, y mantenía la hora con un volante giratorio. Ver en imitaciones relojes suizos
He aquí algunos datos interesantes sobre la historia de los relojes:
- El primer reloj de pulsera fue fabricado para una mujer, la condesa Koscowicz de Hungría, por el fabricante de relojes suizo Patek Philippe en 1868.
- Los primeros relojes eran terriblemente imprecisos; uno bueno podía variar hasta 15 minutos en un día. La precisión moderna (unos pocos segundos al día) no fue alcanzada por ningún reloj hasta 1760, cuando John Harrison creó sus cronómetros marinos.
La precisión fue alcanzada a partir de 1854 primero por la Waltham Watch Company, a través de la industrialización del proceso de fabricación de la pieza del movimiento, para alcanzar la precisión necesaria.
- La invención del reloj de cuarzo en la década de 1960, que funcionaba con electricidad y guardaba la hora con un cristal de cuarzo vibrante, supuso un cambio radical para la industria. En la década de 1980, con la introducción del Seiko Astron, los relojes de cuarzo arrebataron el mercado a los relojes mecánicos, un acontecimiento conocido como la «crisis del cuarzo», que sumió a la industria relojera suiza en una crisis, al tiempo que reforzaba las industrias relojeras japonesa y estadounidense.
- En la actualidad, los relojes mecánicos son sobre todo un producto de gama alta, que se adquiere por razones estéticas, por apreciar su fina artesanía o como símbolo de estatus. Combinando lo mejor de la artesanía, la historia y el diseño, los precios de los relojes mecánicos pueden llegar a ser millonarios.