Hacia una sociedad accesible con sillas salvaescaleras

¿Qué clase de sociedad empática, comprensiva e inclusiva estamos construyendo si no concienciamos más a fondo a la población general sobre el problema de la accesibilidad? Muchas personas tienden a pensar que, en el caso de los colectivos minoritarios, no es tan esencial hacer un esfuerzo conjunto en construir políticas simples que los ayuden a tener una vida fácil. Pero nada más lejos de la realidad: minoritario o no, es un grupo formado por personas que, como cualquiera de nosotros, tienen derecho a tener una vida digna. Si nosotros demandamos, por ejemplo, acceso económico al transporte público, ellos merecen acceso a rampas y sillas salvaescaleras.
Es el particular el último caso mencionado el que todavía suspende en cuanto a políticas públicas, privadas, en general institucionales y empresariales, que podamos considerar decentes. Como mínimo, debería haber una salvaescaleras en todos los edificios de dos o más plantas, especialmente si no disponen de ascensor. Incluso aunque lo tuvieran, no cabe duda de que el acceso a los elevadores se ha visto seriamente limitado a consecuencia de la pandemia de la COVID-19, ya que no es recomendable que muchas personas lo utilicen y, por lo tanto, compartan un espacio pequeño sin la obligatoria distancia de seguridad.
Por supuesto, en cuanto al uso de elevadores, al igual que en cuanto al uso de rampas en el transporte público, las personas con movilidad reducida deben tener prioridad de uso. Pero a menudo no basta o, sin la debida vigilancia, muchas personas sin fondo moral ignoran esa deferencia. Es entonces cuando entran en juego las sillas en cuestión. Buscar precios de salvaescaleras e invertir en ellas nunca será un gasto inútil, ya que a largo plazo, es más, de manera indefinida, muchas personas que lo necesitan dispondrán de libertad de movimientos.
En resumen, está claro que hace falta una concienciación social con respecto al problema de la accesibilidad, en general, en todos los ámbitos, desde el educativo hasta cualquier otro reducto social. Pero eso empieza por las propias instituciones y gobiernos, que deben predicar con el ejemplo. Solo así construiremos de verdad una sociedad más justa.
FECHA: a las 15:33h (147 Lecturas)
TAGS: salvaescaleras, sillas salvaescaleras, precios de salvaescaleras
AUTOR: Contenidos7