Un parquet con estilo

Lo que se consigue con un suelo de roble colocado en espiga es difícil de conseguir con otro tipos de pavimentos. Lo tradicional, lo clásico, vuelve para quedarse, con su elegancia particular; la mezcla de estilos le da un toque único a nuestro hogar, instalar un parquet en espiga, junto con un mobiliario cosmopolita con toques de color, da como resultado un efecto que a nadie deja indiferente.

Decoradores e interioristas apuestan por esta vuelta a la elegancia de lo clásico, sin enmascararla, dando a esos suelos de parquet en espiga el lugar que merecen. 

Si hay una cosa cierta es que la calidad de los pavimentos de madera y el arte a la hora de elegir la decoración y el mobiliario, dicen mucho del buen gusto, de un estilo que otorga a una casa, el confort y la calidez de un hogar.

La elección sobre el tipo de madera y la forma de instalación influye en el presupuesto. Hay clases de madera más costosas que otras, y lo mismo ocurre con la forma de colocación de los suelos de madera; por ejemplo, la instalación de un parquet en espiga o en punta hungría es más complicada y requiere de un trabajo más especializado y más delicado que en el caso de un pavimento de madera en líneas rectas.

Un apunte para los que desconozcan la diferencia entre la colocación de un parquet en espiga y un parquet en punta hungría. En espiga, el ángulo ha de ser de 90 grados, mientras que en punta hungría, el ángulo sería de 45 o de 60 grados. Según la amplitud del ángulo, conseguiremos un efecto visual diferente. 

Entonces, lo único que juega en contra de la elección de un parquet en espiga es su alto precio, sin embargo, el resultado es un suelo atemporal, no afectado por las modas, y su revalorización en el tiempo es otro gran punto a su favor.

Un parquet en espiga que se adapta a todos los estilos decorativos y que dispone de múltiples acabados: texturas al aceite, decapados, con nudos, sin nudos, rústicos. 

Seguro que hay un pavimento de madera y un sistema de colocación para todos los gustos y presupuestos económicos, solo hay que encontrar el nuestro.