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Toda persona quiere que su dormitorio sea una especie de santuario, capaz de aislar el desgaste de la vida diaria, un lugar refrescante, agradable y acogedor que se presente como el espacio ideal para recargar las energías. Como una de las habitaciones más privadas de la casa, es un lugar en donde el diseño puede depender de las preferencias particulares, cada individuo desea agregarle un estilo propio a su dormitorio, buscando la creación del mejor escenario que permita el disfrute de un dulce sueño, reparador y feliz. Entre los diversos estilos que se pueden adoptar, se encuentran los dormitorios clásicos, estos se centran en brindar un ambiente cálido, además, lo clásico no pasa de moda, este tipo de habitaciones son preferidas por muchas personas, cálidas y acogedoras, sin dejar de lado lo sofisticado y elegante.

Características de los dormitorios clásicos

Los dormitorios clásicos se caracterizan por presentar colores de tonos neutros, con ligeros toques para crear un ambiente más efímero, que dé a pensar en algo antiguo, los inmuebles (la cama, el armario, mesas de noche...) generalmente son de madera. Sin embargo, los dormitorios clásicos no deben dejar de lado los toques modernos, principalmente porque la tecnología es parte fundamental en la vida de las personas, por lo cual se tiende a incluir televisores, equipos de sonidos, entre otros artefactos, dentro de las habitaciones. Esto no es algo necesariamente recomendado, muchos decoradores afirman que estos aparatos electrónicos deben encontrarse fuera de los lugares destinados a dormir, sin embargo, es una realidad que no se puede dejar de lado. Por lo cual es importante equilibrar la noción que se tiene de dormitorios clásicos con las necesidades del hombre del siglo XXI.

Factores a considerar para el diseño de dormitorios clásicos

En la decoración de cualquier dormitorio, incluido los dormitorios clásicos, un factor importante a considerar es el espacio, no se quiere tener un ambiente sobrecargado. El punto central es la cama, es aconsejable ubicarla a un lado de la ventana, de tal forma que la luz natural no moleste, antes de adquirir la cama se debe visualizar el lugar donde se va a colocar, pues es necesario dejar espacio para mesitas de noche. Otro elemento sumamente importante es el armario, se puede destinar una pared para su ubicación, y si lo deseado es brindar una sensación de amplitud es recomendable comprarlo en algún tono claro.

En este tipo de dormitorio generalmente se encuentra un suelo de madera, estos brindan al espacio una sensación de amplitud y limpieza. Las alfombras pueden ser una opción bastante viable, especialmente si se cuenta con un sueño ligero o la vivienda está ubicada en un vecindario ruidoso, estas amortiguaran el ruido a diferencia de los suelos de madera.  No es necesario adoptar una sola idea, se puede lograr algo equilibrado, en donde algunas zonas se visualice la madera y otras tengan alfombras mullidas, muy cómodas, además, para andar con los pies descalzos.

Los accesorios son los que definen el estilo del dormitorio, siempre es bueno utilizar cojines de diferentes tamaños y formas, colocándolos en la cama, estos dan una apariencia de comodidad bastante amplia y el deseo de pasar más tiempo dentro que fuera de ella. Si las ventanas son de gran tamaño, lo mejor es utilizar cortinas de telas ligeras y tonos claros, así entrará la mayor cantidad de luz natural posible, lo cual permitirá aumentar visualmente el espacio.  

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