Cómo afecta la contaminación lumínica a los océanos

Durante la noche, es cuando se da más uso (muchas veces innecesario) de las fuentes artificiales de luz, incrementando la ya creciente contaminación lumínica, afectando de gran manera la composición de invertebrados marinos, algunos procesos biológicos de animales nocturnos, lo que con el tiempo, generará grandes consecuencias en los ecosistemas oceánicos.

Efectos de la luz artificial sobre los océanos

La luz artificial que se ve durante las noches en los puertos o zonas cercanas a las costas marinas, ha causado un impedimento en muchas especies que intentan realizar diversos procesos durante las noche, como las larvas de los invertebrados, que requieren de la radiación luminosa natural para localizar un hábitat seguro.

También se ve con preocupación, como los efectos de la luz artificial, afectan a las tortugas marinas en su proceso reproductivo.

Aves marinas confundidas y aturdidas

Muchas aves marinas al abandonar sus nidos e iniciar el vuelo hacia el océano, terminan por sentirse atraídas ante las intensas luces de las carreteras o puertos. Estas luces terminan por desorientarlas y acabar tiradas en el suelo, donde corren el riesgo de ser atropelladas, o sufrir de algún otro accidente.

La luz artificial afecta el ciclo reproductivo de los corales

Según han estudiado varios expertos, se cree que el incremento de la contaminación lumínica en las zonas cercanas a los mares, contribuye a un problema en el ciclo reproductivo de los corales.

Al verse excesivamente expuestos a la luz, no realizan sus actividades nocturnas, como su reproducción. Varios experimentos han demostrado que los corales expuestos a la luz, no realizan sus procesos naturales en comparación a los que se les ofrece un tiempo de oscuridad.

Esto es importante pues los arrecifes se deterioran lentamente al no realizar sus procesos naturales, y son fuente de vida para muchos ecosistemas, incluso los humanos.